jueves, 24 de diciembre de 2009

De fines y principios


Otro año que vuela y, de repente, a todo el mundo le entra ganas de hacer lo que no hace en todo el año. Pero sólo se queda en las ganas, luego tampoco se cumple. Atrás queda la buena voluntad, (muy atrás) y los propósitos de enmienda. El gambón tiembla y la VISA echa humo como para subir un grado la temperatura global. Y de la última entrada ha ya tanto tiempo que no recuerdo con quién me iba a meter hoy, aunque estemos en "esas" fechas que los humanos celebrábamos mucho antes de que algunos decidieran cuándo nació el Redentor. Vamos, desde que nos dimos cuenta de que empezaba un nuevo ciclo solar y los días empezaban a hacerse más largos, lo cual, en la era glacial, se agradecía una barbaridad.

Podríamos recordar gracietas como las del ya afamado Alejandro Font de los telediarios, más conocido entre la Plataforma per l'ensenyament como Alejandro Berry Spring, o "el fondemora dels collons" en otros sitios que yo me sé. Verbigracia, la de ofrecer para el estudio de nuestros educandos el chino mandarín, lo cual nos vale enormemente para hacernos entender en cualquier bar de Mislata. Todavía estoy esperando que para entrar en les Corts hagan el examen del Grau Mitjà o el First Certificate, ya que tanto valoran el uso de las lenguas que desconocen nuestros mangantes mandatarios. Aunque resulta más campechana la anécdota de querer tildar a ZP de provocador de miopía galopante infantil por el uso de miniordenadores portátiles en la enseñanza. Al presi se le podrá tildar de muchas cosas, pero es que ver la pajita en la ceja ajena y no ver la correa en el juzgado del amigo... tiene delito. Pero para eso están los amigos.

Mas como los fines de año son más dados a la despedida que a los vanos recuerdos, prefiero despedirlo con un texto póstumo de Pedro Antares, periodista respetado por unos y otros. Feliz año a los que seguimos en este mundo, que los demás ya saben lo que, afortunadamente o no, se pierden. Sirva de espóiler a los que no tengan ganas de leer. Un texto crítico para una crítica Navidad.

El fin del milagro español

Lo diré de entrada para que no haya engaños: me acuso y arrepiento de formar parte, por razones obvias de edad, de la "generación de la Transición". En realidad, nací un poco antes, en un tiempo que un poeta español en el exilio, ya desaparecido, definió "como la generación a la que las bombas rompieron sus juguetes". Otro poeta, más reciente, hablaba de que España se había convertido en uno de los pocos países del mundo "donde los mayores no tienen paisajes de infancia para memorizar su pasado". Costas, lagos, montañas, pueblos, vestigios históricos, arquitectura rural... Apenas quedan referencias, engullidas por las tuneladoras, grúas, urbanizaciones, zanjas, adosados. Es el famoso agujero inmobiliario, que, ahora, expertos y políticos, como si fuera una sorpresa, se afanan en desentrañar.

Y aquí ya entra la política, la Transición, primero santificada y ahora denostada. Nacimos millones de españoles dentro de una dictadura férrea, sin libertades, pero con turismo, cierta industrialización y aires de cambio, a veces tempestades, en costumbres y modos de vida. Quien tenía pasaporte viajaba a Perpiñán a ver El último tango en París. Volvían muchos de los dos millones de emigrantes esparcidos por Europa. Empezaron a proliferar desde la periferia, en Cataluña sobre todo y luego en Madrid, reuniones y viajes; la Universidad bullía. Emergen los sindicatos históricos y nace CC OO. Los llamados curas obreros, arropados por voces como las del padre Llanos, José María González Ruiz, José María Díaz Alegría, Enrique Miret y el padre Arrupe, encontraban cierta tolerancia ante las diversas censuras. Los obispos parecían lejanos, excepto Tarancón, y muy preocupados por el Concordato con la Santa Sede, por si se escapaba alguna subvención. Y, a velocidad de vértigo, todo llegó a la vez, incluso con el dictador en la cama. Con la Revolución de los Claveles en nuestro costado, España se abría paso en Europa, especialmente, después de la aparición de la sopa de letras, la Junta Democrática, Coordinación Democrática, la Platajunta.

Pero el dictador, antes de morirse del todo, tuvo tiempo de cumplir uno de los mayores deseos de su vida: firmar el acuerdo de las bases con EE UU, supuestamente conjuntas y nunca sabremos si con armamento nuclear, y consiguió acompañar a un presidente de un país democrático en un descapotable por la Gran Vía madrileña cubierta con banderas americanas. La compra les salió prácticamente gratis a los yanquis, como tantas otras cosas, las bombas de Palomares por ejemplo. Pero, genio y figura, antes de sus últimos suspiros, el "Caudillo" había tenido tiempo para firmar cinco penas de muerte.

Y llegaron las elecciones del 17 de junio de 1977. Nunca se había visto en este país, desde la proclamación de la Segunda República, tanta participación, tanta alegría en la calle, tanta esperanza en la democracia, algo impensable hacía pocos meses, cuando todo parecía venirse abajo con el ametrallamiento de los abogados laboralistas de la calle de Atocha en Madrid por la extrema derecha. Algunos quedaron en el camino, pero el 17 de junio fuimos, en familia, a votar por primera vez en nuestra vida. Yo tenía 42 años y nunca se me había pasado por la cabeza que la primera presidenta de las Cortes Democráticas fuese nada menos que Dolores Ibárruri y, sobre todo, que iba a servir de coartada a un Parlamento hecho a medida de las élites franquistas, según acabo de enterarme.

Las elecciones podaron drásticamente la sopa de letras y surgió una palabra, ahora maldita: el "consenso". España tenía un objetivo absolutamente prioritario: Europa y, con ella, la democracia. Por una vez, derecha, izquierda y nacionalistas aparcaron diferencias, pulieron viejas aspiraciones y se sentaron a discutir una Constitución que salió descomunal, con la pretensión de cubrir y subsanar todos los desarreglos de un Estado de más de 500 años. Fue bonito mientras duró. Pero la Transición siguió adelante. La entrada en todos los organismos europeos supuso, en un país que no había tenido Plan Marshall, una lluvia de dinero que tiró hacia arriba la emergente industrialización española. Y empezó el milagro, esta vez el económico, ayudado en parte por la llegada masiva, que no es lo mismo que "invasiva", por tierra, mar y aire, de más de cinco millones de emigrantes. Confío en que alguien cuente en el futuro la epopeya de pateras y cayucos, en un país de tradición de exilios durante siglos. Ahora, los emigrantes engrosan el paro sin que nadie pida perdón por los salarios de hambre, los alojamientos basura, los brotes de racismo y xenofobia... España no hubiera llegado donde estaba antes de la crisis sin la emigración. Fenómeno nada nuevo en Europa, ¿o es que después de la II Guerra Mundial, Alemania hubiera llegado a ser la locomotora de Europa sin esos más de dos millones de turcos que la reconstruyeron ladrillo a ladrillo, piedra a piedra, mientras los niños prodigio del nazismo se acicalaban tirando a la basura las cruces gamadas? Y otro tanto podríamos decir de Reino Unido, Bélgica o Francia. Claro que estos países tenían la cantera, no tan agotada, de las colonias...

El caso es que fue todo un éxito, España dejó de jugar en segunda división y se convirtió en "milagro": la séptima potencia industrial. Pero había más milagros. La "generación que trajo la democracia" se entendía, hablaban entre ellos, y mucho de política, que ya era hora. Fraga decía que la política formaba "extraños compañeros de cama" y lo rubricaba al lado de Santiago Carrillo después del 23-F. Cuando la cosa se puso mal, los sindicatos echaron una mano, y llegaron los Pactos de la Moncloa: por encima de los intereses partidarios. Estaban la democracia y una Constitución. Luego ya veremos. Y lo estamos viendo...

España, ya sin milagro y, especialmente, sin Transición, que es ahora objeto de análisis. Por ejemplo, éste, salido de la pluma de un profesor universitario en un periódico de cobertura nacional: "Se construyó un Parlamento, a la medida para el cambio de camisa de las élites franquistas. La ignorancia de los ciudadanos educados tras la muerte de Franco oculta las atrocidades de la dictadura". Así de claro y de contundente. Tiene razón. Con las prisas y tanto ajetreo, a esa generación se le olvidaron algunas cosas. Por ejemplo: cierre inmediato de las bases americanas en España, expulsión de su embajador, denuncia y ruptura del Concordato con la Santa Sede, invasión de Marruecos en defensa del Frente Polisario, Ceuta y Melilla, y lo más importante: situar al Rey en un tren hacia Irún. Es evidente que quedaron la tira de cosas por hacer. Pero, por no aburrir, espero que alguien las recuerde. Después de decenas de libros, de miles de artículos, conferencias, coloquios y, sobre todo, de haberla vivido, salvando las distancias, la "generación de la democracia", como Adriano, confiesa "estar en una edad donde la vida es una derrota aceptada". A la vista está.

¿Y qué es lo que se ve ahora, sin milagro? Primero, el sálvese quien pueda. El Gobierno en su guarida y la oposición -¿o es más bien "la contra"?- al acecho de su permanente desgaste, por aquello de que cuanto peor mejor. Las baronías se han convertido en "virreinatos" con mención de honor a Valencia y su Educación para la Ciudadanía en inglés. Y una medalla especial para la Virreina de Madrid, la condesa descalza y su afán por cambiar las leyes cuando no se ajustan a sus intereses y por acabar con la educación pública y la sanidad, que, como todo el mundo sabe, son cosa de pobres. Y aún hay más: la intensidad, duración y sonido de los reiterados besos a su rival, Gallardón, no obstante, la cara de madrastra de Blancanieves que se le pone. ¿Continuamos? Sólo una cosa: los obispos crucifijo de Trento en ristre. Nada que objetar. Sólo un recuerdo para el ministro de Agricultura de la República, Manuel Jiménez Fernández, católico "de los de comunión diaria", catedrático y maestro, que solía decir: "No tengo nada contra los obispos españoles, salvo dos cosas: no creen en Dios y no han hecho el bachillerato". Pues eso.

Y en esto llegó el nombramiento de Alberto Oliart, en RTVE. No entro en el tema del famoso ERE del ente a partir de los 52 años. Interesados pueden leer El señor de las moscas. A lo que voy es a las biografías de Alberto Oliart en algunos medios, resumidas en una frase: "40 años al servicio de la derecha". Los 81 años lo cubren todo, nada cuenta la capacidad, la honorabilidad, el talante, la lucha por la democracia desde el siempre olvidado mundo de la cultura (¿alguno de esos nuevos inquisidores ha leído Contra el olvido?), dentro de un envase conservador, pero abierto a las nuevas realidades. Se opuso a la guerra de Irak. Fue un hombre importante en la Transición y ocupó la cartera de Defensa durante el juicio del 23-F en Campamento. Nadie es perfecto. Pasaba por allí.

¿Y del Gobierno? En recuerdo y homenaje a Tip y Coll, "del Gobierno hablaremos otro día".

FE DE ERRORES

Las primeras elecciones democráticas de la Transición se celebraron el 15 de junio de 1977, no el 17 como se afirmaba en El fin del milagro español, de Pedro Altares, publicado el pasado día 7.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Cosas que ocurren un "finde" cualquiera

Un sábado vas a comer a la cafetería-restaurante de La Beneficencia (un centro cultural que da de comer a muchos funcionarios necesitados de tiempo libre) que disfruta de una terraza al aire libre (como toda terraza que se precie) que se respira en el jardín interior de dicho centro. En mi vida imaginé que un carrito de plástico para muñecas tamaño bebé pudiera estar dentro del catálogo de objetos requisables susceptibles de dañar el patrimonio museístico epañó-valensià. Pero tal como abres el carrito y lo empujas para que tu hija no provoque un hinchamiento de gónadas paternal y desfogue su hiperactividad con un producto en apariencia inofensivo, aparece un ocioso guardia de seguridad que advierte de la prohibición de introducir en el museo artículos como el mentado carrito. La verdad que no pensaba introducir el carro en ningún sitio, pero con esa regla sí que dan ganas de hacerlo con su perpetrador. No es de recibo que los niños jueguen a la pelota en una sala de exposiciones, pero ¿un carrito en un jardín? Asínque, ya lo saben, mientras introduzcan la Nintendo o la PSP, no problem, lo importante es no dañar el patrimonio, no los cerebros.

Un domingo, un aficionado a la Fórmula 1 que no se entera hasta el mismo "finde" de la celebración de un espectáculo de Ferrari en Valencia y Cheste asiste anonadado y por televisión a un espectáculo aún mayor: un "poc" Honorable President que no asiste al congreso de su partido porque su obligación le reclama prestar servicio a todos los valencianos en pro del empleo de la Comunitat por la gloria de la Mare de Déu (pausa para respirar), conduciendo un Ferrari último modelo a la vera de Rita (el bolso que se da no se quita) y transportando al "presi" de Ferrari y sus pilotos Alonso y Massa.

¡Qué sacrificio por la Comunitat! ¡Cuánto empleo estable con un gesto tan sencillo e informal! ¡¡Nunca podremos reprochar a la Generalitat los millones de euros que presta a al agujero negro Terra Mítica con tales servicios al Servef!! Valensians!! Aprengau del vostre leader i arrimeu el muscle!! Ah, no!! el hombro, que muscle es català!!


Che, lo que faça falta!!


PD: En el momento de escribir estas líneas, un señor llamado Benedicto residente en Roma critica la opulencia en una Cumbre sobre seguridad alimentaria (eufemismo de "hambre"). Sí, me refiero al mismo Benedicto que lleva una cruz de plástico y vive en una favela de Río para no ostentar opulencia. Pero de esto ya hablaremos otro día, que los lunes ya no son "finde".

"Finde" la entrada.

sábado, 17 de octubre de 2009

Cosas que ocurren un viernes cualquiera

¡Qué cosas!
Ayer por la tarde tuve una reunión en la universidad donde crié mi licenciatura primogénita. Se trataba de coordinar e informar sobre el examen de selectivo de francés de este año. Por supuesto, nada que ver con la antedicha licenciatura, que consistía básicamente en buscar en contenedores o perseguir profesores; a veces los últimos en los primeros, las más veces sin resultado alguno: esto es, Bellas Artes.
Retomando el idioma, siempre pensé que los que hemos estudiado francés somos una pequeña familia, en comparación con las hordas anglófilas, mercenarias de la pérfida Albión. Pero nunca me imaginé que a los profesores interesados en la coordinación del selectivo nos empotraran cual sardina en lata en una sala de 24 asientos (Saló de Graus del Politécnico). La élite, la crème de la crème. Somos pocos, pero no nos tenemos tanto apego como los nipones en hora punta del metro.
De acuerdo con que probablemente asistan más profesores a la reunión que estudiantes de francés al examen. Pero esto no habla muy bien de las altas esferas que se encargan de "coordinar" y asignan los espacios. Supongo que, en comparación, la reunión de inglés la habrán celebrado en el Mestalla.
Lo mejor: tras finalizar el encuentro (el de francés, no el de Mestalla), de paseo al coche por los jardines cercanos a la universidad, vi un señor mayor, jubilado y jubiloso. Leía con esfuerzo una novelita de vaqueros editada varias décadas atrás. Se le veía muy concentrado, dedicándose a lo que seguramente no había podido hacer de pequeño porque tenía que trabajar. Tal vez en la huerta que ahora es un inmenso aparcamiento enfrente del parque.
En otro lado, alguien buscaba al Poc Honorable President sin resultado alguno, parecía haberse volatilizado antes de llegar a Les Corts, tan vacías como el aparcamiento --eso sí, luciendo sus pendones. Como el pendón de Castilla, aquí tenemos el de En Jaume... y muchos más. Els que facen falta!!


domingo, 13 de septiembre de 2009

Algo huele a podrido

... y no es en Dinamarca, como en Hamlet. Según el leader de la oposición antiZP, es en Benidorm.
¡Acabáramos! Llueve sobre mojado, y los allí residentes (english or spanish people?) ya estaban sobreavisados de la situación en 1991, cuando nuestro ex Molt Honorable Eduardo Zaplana alcanzó la alcaldía gracias a una moción de censura al PSOE. Moción que prosperó gracias a la nada desdeñable ayuda de lo que hoy se considera "tránsfuga". Además, es curioso que esa misma persona que aupó al de "nos vamos a forrá" es la que se va a quedar en el paro cuando prospere la contramoción que pone los pelos como escarpias al PP de la Valencian Comunity y, por ende, al de Génova (Génova de Madriz, no la italiana; allí son más de Berlusconi, pero bueno, lo mismo da que muerda un perro que una perra).


¡¡Es él, es él!! (Y la ínclita tránsfuga). FOTO: Santiago Carreguí, 1991.
Resulta no menos curioso que los ex-ediles del PSOE también sean tachados de tránsfugas cuando, tras ser amenazados de expulsión de su partido, decidieron abandonarlo para trabajar (o no) por el municipio. Cosas del diccionario de los políticos, donde la polisemia y la antonimia se confunden tan a menudo en los mismos conceptos.

No conozco el grado de encabronamiento político en Alemania, pero me da que deberíamos aprender de allí para rebajar humos. Para dar fe de ello, cotilleen algunos de los carteles electorales de las recientes elecciones teutonas, nunca mejor dicho:



Oteando lo oteado, queda claro que, aunque el partido de la Merckel "tenga más que ofrecer" (el bienintencionado lector habrá apreciado que en la propaganda de la CDU no se hace ningún tipo de insinuación pese a los escotazos mostrados), a los equivalentes peperos y sociatas germanos no les ha ido nada bien, y los antes partidos minoritarios ya no lo son tanto (su suma se aproxima al 40%; igualico que aquí). El ascenso de los Verdes ha sido tan espectacular como los morenos glúteos del cartel --ésta va por los Miércoles Fotográficos.

Simplificando: los dichos populares (admítase cualquier interpretación de "populares") pierden validez hoy día. Ya no "tiran más dos tetas que dos carretas", y eso que las pechugas exhibidas deben pesar lo suyo. Se lleva más el "pompis agarrao": uséase, vale más glúteo en mano que escote ventilado. Y volviendo a lo podrido: yo que usté, Mariano, me hacía mirar el olfato en el otorrino. Oler a podrido tan lejos cuando no se huele nada en algo tan próximo como el caso Correa tiene tintes de miopía olfativa galopante. De las que pasan factura. (¿Dije facturas? Ah, sí. Pero no de trajes, ¿verdad?).

miércoles, 26 de agosto de 2009

Cumpleaños desliz

Así, a lo tonto, hace más de un año que empezó esta tontería con un selecto club de lectores, al que se han añadido dos o tres más. A decir verdad, y hasta mayo, funcionaba con regularidad, lo cual era bastante más de lo esperado para una iniciativa producida por el ocio estival. Seguramente, el retorno a la actividad cotidiana será el momento all-bran para recuperar esa regularidad que se espera de un blog.

Mientras tanto, también se espera el retorno a la regularidad económica y laboral para superar la recontrasobada crisis. Claro que los salvadores de la patria, que siempre saben todo lo mal que gobierna el contrario, teniendo ellos mismos la clave del éxito aroundeguorld, cuando se ven perseguidos por Torquemada no se ven capaces de arrimar el hombro para ayudar a su mentadísima patria. Cosas de la paranoia y de haber controlado tanto tiempo la Fiscalía General del Estado. Echan de menos no poder controlarla ahora y haber renovado el CGPJ (cómo cuesta soltar la poltrona, Mariano); sin duda no habría aflorado tanta hez que bien se encargan de ocultar al ciudadano. La pena que da es que ya se ha asumido que no hay culpable nunca, que los culpables los deciden los jueces, y que si un juez señala un culpable es terríblemente injusto y si lo absuelve triunfa el Estado de Derecho (a no ser que sea del partido contrario).

Mariano echa pecho, Camps echa pecho, Rita echa Beefeater al gin-tonic, Aznar marca abdominales (no se pierdan la foto con las gafas de sol de espejo y el bañador de Chiquito de la Calzada: sólo le falta el paquete de Fortuna en la cintura, oigan). No se entiende cómo un hombre que previno la crisis cuando estaba en el poder no reformó la dependencia económica de la construcción, sino que permitió que se potenciase exponencialmente. ¿Será por eso que prefirió pasarle la patata caliente a Mariano, mientras encontraba varios puestos de trabajo que le hacen ganar más sueldo que de presidente y le dejan más tiempo libre para hacerse sus 2000 abdominales diarias?

En fin, recuperemos la normalidad: los parados a la cola del INEM para renovar la tarjeta y cobrar si es que aún queda que cobrar (ey, señor de la cola empezando por la derecha, ¿usted no hace trabajos en negro y habla de Zparo? ¿No le da pena con la de banqueros desempleados que hay?). Los temporeros a recoger el circuito de F1... (¿qué beneficios habremos sacado los valencianos? ¿Dos o tres euros?). La Generalitat avalando al Valencia CF (una sociedad anónima) mientras pierde expedientes de subvenciones del PROP para comunidades de propietarios...
Si es que nos quejamos porque queremos, porque en la Comunidad Valenciana votamos lo mejor de lo mejor. Si gobernara la izquierda esto sería un caos: venga a conceder hipotecas a diestro y siniestro sabiendo que no se pueden pagar y luego sacarlas al mercado financiero... sería un verdadero crack mundial. Pero eso aquí no puede pasar porque la culpa sólo puede ser de ZP. Y estamos a salvo mientras siga nuestro Molt Honorable Notincfacturesdeltratcheoigue.

Ah, y se me olvidaba la objetividad, la veracidad y las relevantes informaciones de Canal 9.

Ya saben, prepárense para decir: ¡Las vacaciones se han acabado: vivan las vacaciones!

jueves, 30 de julio de 2009

Solución a la crisis: espíritus a destajo


Han leído bien. Roto el "diálogo social", que es el eufemismo que se escucha en los telediarios cuando los empresarios dicen cómo tienen que pasar por el aro los trabajadores delante de las narices del Gobierno, hemos encontrado la solución para que la CEOE no tenga que recurrir a medidas veladas para abaratar el despido y reducir visiblemente los derechos de los trabajadores o los ingresos a la seguridad social.

¿Adivinan cuál es el campo de la CEOE? Fectivamente.

Si usted acostumbra a tirar al suelo o a la papelera todo panfleto publicitario colocado en el parabrisas de su coche se le habrá pasado por alto este remedio eficaz. (Las tarjetitas de puticlub, ya no las tiramos, ¿¿heiiiin??). Yo, sin en cambio, conservo algunos dignos de mención, por lo que pudiere pasar.

Presentan el tamaño de una dieciseisavilla (la mitad de una cuartilla) al tiempo que a un gran maestro vidente africano. Algunos tienen hasta teléfono fijo (el móvil, por descontado). El criterio ortográfico es bastante flexible, aunque por lo general parecen pasados por el corrector de Word. Y el gramatical, pequeño saltamontes, ése si que es flexible y no el bambú en una noche de luna llena primaveral del año del Tigre. Por no hablar de la puntuación. Unos textos sin parangón en Obregón. Verbigracia:

Resuelve todos los problemas inmediatamente con un don hereditario, posee un poder sorprendente, con su experiencia, seriedad, poder y rapidez demostrado en todos los ámbitos para ayudarles en todos sus problemas amorosos incluso en situaciones desesperadas posee un gran poder a distancia provoca, atrae y refuerza los sentimientos en resumen todo tipo de artes ocultas, ver a sus enemigos de rodillas, mejorar su situación social y financiera, desintegra a los demonios de infierno. (¡Coño, un punto!) Gracias a mi asombroso secreto (¡qué dominio de la narrativa, cómo pasa del narrador omnisciente a la primera persona!) hombres y mujeres estarán a tus pies. Tengo los espíritus mágicos más rápidos y poderosos que existen, llama y la suerte te sonreirá. Resultados en 3 días. 100% garantizados, inmediatos al 100%.

Me pregunto si este vidente trabaja con los espíritus de este otro, y me da que sí:

SOLUCIONA TODOS LOS PROBLEMAS:
DE AMOR, RECUPERACION DE PAREJA DE INMEDIATO

Gracias a su poder natural, resuelve todo tipo de problemas por difícil que sea en 3 días con resultados 100% garantizados con rapidez y eficacia. Le ayuda en la resolución de problemas de matrimonio, trabajo, negocio, de protección, quitar hechizos, mal de ojo, impotencia sexual, limpieza con máxima eficacia (mira, eso no le iría mal a mi piso), problemas judiciales (¡¡escuche usté, señor ministro!! ¡¡y usté también, Molt Honorable Presidente de la Cheneralidad!!), suerte. Tiene los espíritus más rápidos que existen y puede solucionar rápido cualquier dificultad amorosa (por si no había quedado claro).
TRABAJO SERIO (¡ay, que me da la risa!) Y GARANTIZADO
RECIBE TODOS LOS DIAS DE 8:00 A 21:00 (Y aún se quejan los sindicatos de la jornada laboral)

Desgraciadamente, desconocemos el caché de estos espíritus estajanovistas, pero no me digan que no es para pensárselo con esos resultados... ¿eh?

¿Qué podrán hacer los espíritus contra la "campaña brutal de acoso contra el PP"?

jueves, 23 de julio de 2009

Trajes, mentiras y cintas de audio


Se podría hacer una película con este título a raíz de la trama Gürtel, en la que parece no haber ningún culpable más que el malo malísimo que hace cosas ilegales con los que se lo permiten, que por lo visto eso no es digno ni de mentar la dimisión. Total, el PSOE inventó el GAL, Roldán y el hermano de Alfonso Guerra, con eso el PP cree tener cien años de perdón.

Evidentemente, si usted se caracteriza por su perspicacia, ya sabe de qué trajes hablamos; y si no, seguro que también. Por si aca ofreceré más pistas. Un señor que pasa de desconocer por completo la existencia de una persona a "quererle un huevo" en una grabación que, alguien que no lo quiere precisamente "un huevo", filtra a los medios de comunicación.

Ah, esa es otra, las filtraciones. Normalmente hay que sanearlo todo, hasta las bajantes. Lo mejor del asunto es que ésta y otras muchas grabaciones fueron puestas a disposición judicial por compañeros de partido del Molt Honorable President de la Cheneralitat o Generalidad (Valenciana, se entiende, porque la catalana se llama Generalitat, pronunciada "Yeneralitat"). Así que en lugar de querellarse contra el mensajero haría bien el PP en mirar en casa, porque o hacen ya la lavadora de trapos sucios o las manchas no salen ni con Vanish Oxi Action Multi.



Luego, hay un señor que hace trajes que dice que el cliente, de pagarse de su bolsillo los trajes, nanay. Que las facturas vienen a nombre de un tal Crespo (del PP) y una serie de empresas con las que trapichea (nunca mejor empleado lo de trapichear con trapos). Por ello, con la conciencia limpia, le debió telefonear hasta 8 veces el mismísimo Camps cuando Garzón interrogaba al sastre. ¿Más trolas del Presi? Nooooooooooooooo...

Todo parece llevar a una conspiración judeo-socialista-masónica en contra del PP, puesto que la trama salpica hasta el tesorero y senador Bárcenas y una lista de 70 personas. Por supuesto, dándole la razón a la plana mayor del PP, enfadadísima por el "qué diran", tanta parafernalia parece ser un montaje; con tanto extra contratado, ya me dirán... Para que las salpicaduras lleguen al premio de Fórmula 1, (el mismo Gürtel que viste y calza dijo: "aquí hay pelas y, si sale bien, hay pelas para todos. Una pastuqui importante"), imagínense. Por cierto, ¿recuerdan aquello del magnate Ecclestone de condicionar la celebración del gran premio a la reelección de Camps? ¿Tendría algo que ver que la mano derecha de Ecclestone sea Alejandro Agag, yernísimo de los dirigentes de Aznatella o Aznabote o como quiera que se llame la sociedad sin ánimo de lucro del matrimonio Aznar-Botella? ¿Y tendrá algo que ver que Francisco Correa-Gürtel fuera testigo de la boda de la hija de tal matrimonio que pone los pelos como escarpias?

Por supuesto que no, todo son mentirijillas de Gabilondo y otros secuaces de ZP porque tienen envidia de lo bien que va España donde gobierna el PP y no saben cómo raspar votos. ¡Si las urnas lo confirman! Mira que pretender que Rita recibe bolsos de Louis Vuitton a cambio de nada... ¡Qué mala es la gente! Menos mal que ella sólo comparecerá ante el juez, como dice. Ya es algo: yo esperaba que sólo compareciera ante Dios o la Maredeueta; conociéndola... Mientras tanto, lancemos una campaña de apoyo a nuestra alcaldesa perenne porlosiglosdelosiglosamén con chapitas como la de abajo. ¡Vixca la Mare de Déu! ¡Vixca València! ¡Vixquen les "caenes"! (y si tienen aún ganas de leer, "¡vivan las cadenas!", pero no las de TDT).



lunes, 20 de julio de 2009

¿A quién se le ocurre...

...volver en vacaciones? Pues a mí. Me tomé las vacaciones blogueras en mayo porque andaba un poco "trastonnao" (asín, en plan cartagenero) con el fin de curso docente y teatral. Más por el último que por el primero, ya que en junio hice más ensayos que Jonah Lomu. (Esto ya es de nivel, pues he tenido que buscar un jugador de rugby para hacer el chiste, la cosa está muu mala).

Para los que no vieron la obra, una adaptación en valenciano de Baal de Bertolt Brecht (ahí es nada), que chinchen y rabien porque hizo lleno los cuatro días de representación con aplausos atronadores y salidas a hombros de los actores, lanzamientos de castillos de fuegos artificiales y... bueno, tal vez exagere un poco, pero es que en Valencia somos así. La verdad es que para la complejidad de la representación y las circunstancias que han rodeado el montaje es una versión más que decente, que ha satisfecho en general incluso al público neófito, y no hablo sólo de enseñar carne.

Pero la vida de Baal no acaba en Silla, volverá allí en noviembre y se prolongará hasta 2010 pasando por Mislata y Valencia. Así que no pierdan la oportunidad de acudir a un espectáculo bueno, bonito y barato de la Escuela Municipal de Teatro de Silla, dirigido por Ramón Moreno y Amparo Pedregal. Y no es por echarme flores, pero me ha dado muchas satisfaciones mi aparición estelar en el ecuador de la obra; nunca le había sacado tanto rendimiento con tan poco en tan poco tiempo. ¿Valdré para esto? Me pregunto. ¿Me habré equivocado de carrera? Cuestiónome.

El caso es que un poco de autopublicidad gratuita no hace daño, especialmente si se trata de amor al arte, porque esto no da para comer. Nos vemos sobre el escenario, antes o después.



PD: No sé por qué misterio internetero la portada del programa sale con los colores "trastonnaos", pero me mola más que el original, así que la dejo.

domingo, 31 de mayo de 2009

Pasaba por aquí...

...y me pregunté ¿habrá algun lector que extrañe la periodicidad de este blog?

Desde que empezó se viene publicando una entrada por semana y este mayo salió un poco irregular. No es que estemos de reforma en ensalada de palabros, o que la crisis haya llegado a nuestras ideas. Material, haylo, pero su redactor ha entrado en una espiral preestival que le impide centrarse en un producto digno. Aprovechamos la ocasión para pedir al lector que señale alguna entrada de su interés o algún tema sobre el que quisiere que arrojásemos luz y taquígrafos, a ver si el avestruz de aquí a nuestra izquierda se dedica en prontas fecha a elaborar una nueva entrada en condiciones.

Eso sí, se ruega no pisar... la lengua. Refúgiense de campañas electorales empeñadas en retorcer las palabras y vender humo. Sería más edificante poder elegir a quienes no queremos que nos representen...



viernes, 22 de mayo de 2009

Presuntos imputados

Si mi colega de titulación, Soledad Giménez, volviera a dedicarse a la canción, bien podría crear un grupo cuyo nombre recordase a Presuntos Implicados. Seguramente podría hacerle los coros el portavoz del PP Ricardo Costa, quien dice que se le atribuye una presunta imputación. No, señor Costa, de presunta nada. Una imputación, de presunta tiene poco, si no no habría ido a declarar ante el juez. Lo que está usted es imputadísimo y no presuntamente, por cierto. Otra cosa es que en realidad también esté implicado efectivamente en un delito, cosa que dictaminará el juez. Y otra muy diferente es que usted crea que le exculpe que los hechos que se le imputan se produjesen antes de ostentar su cargo actual.

Aunque esta imputación no le haga gracia a los afectados, a mí si me ha hecho reír la llamada de atención sobre tal gazapo en la sección Unidad De Vigilancia (UDV) del programa Hoy por Hoy (Cadena SER), que se emite los viernes a las 9:30 horas y es dirigida por Isaías Lafuente. Y es que el público puede tirar de las orejas a los propios periodistas y ponerse en contacto con ellos para denunciar sus metidas de gamba lingüísticas o las ajenas. O, por lo menos, reírse con ellas.

viernes, 15 de mayo de 2009

Himnosis

En El País de hoy, Juan Cruz firma su artículo con este título tan palabro. La creación de tal vocablo, cuenta, se produjo en tierras americanas (digo americanas, no se entienda estadounidenses, por favor), concretamente en Colombia. Se celebraba la entrega de un premio a Vargas Llosa y la orquesta amenizó al público con los himnos de la organización, de Cali, El Valle --su región--, Perú, España, Colombia, etc... Tal abundancia en himnos le hizo preguntar al columnista a un editor a qué se debía, y éste le respondió que "Colombia vive en perpetuo estado de himnosis".

Aquél que siga mínimamente los resultados futbolísticos y alguno que otro más sabrá que tanto la columna como este título va con segundas. Segundas de primera. Porque todo aquello que se intenta tapar o poner en un plano secundario accede como por arte de magia a la primera plana. O a destituciones fulminantes. Seguramente, aquel trompetista que tocó el Himno de Riego en una final de tenis con tinte español siguió trabajando sin problema después de alguna que otra bronca. Pero el responsable de deportes de TVE no ha durado ni un día tras la pifia de correr un estúpido velo ante la monumental pitada al himno español en la final de la Copa del Rey. Es lo que tiene juntar a unos cuantos miles de vascos y catalanes en el mismo estadio, nada sorprendente. Ni mucho menos, indignante, a menos que queramos hacer de una bandera un sayo. Cada cual que aguante su vela. Así lo creo yo, pues tengo derecho a tener mi opinión como cada cual tiene su culo, parafraseando a Clint Eastwood.

Lo que de veras me sorprende, con tanto revuelo hímnico, es que en dicho artículo se presume la autoría argentina de la Marcha de Granaderos. Su origen se pierde allá en los tiempos de MariCastaña, también llamada Carlos III de Borbón, quien la oficializó. Y como su autor es desconocido... (¡qué cracks!) ahí sale un argentino para reclamar su paternidad. Cualquiera que indague un poco sobre una partitura tan sosa como una marcha militar (afortunadamente enriquecida y orquestada a lo largo del tiempo) dará con un presumible origen prusiano e incluso andalusí, que no deja de ser una conjetura. Vamos, que la sociedad general de autores argentina debe inspirar más repelús que la española. A este paso, Dante Alighieri debió ser de la Boca de toda la vida.

¿Qué quieren? A mí, estas cosas, plim. Ni se me ponen los pelos como escarpias si llaman catalán al valenciano ni se me llevan las furias por una pitada tal, que ni las que se llevaba Schuster. Soy republicano. Y me encantaría que hoy día sonara la voz de Miguel Fleta cantando la letra que se puso al Himno de Riego, que tampoco era un dechado de armonía, pero el mañico le pegaba mil vueltas a Francisco con el Himno del maestro Serrano (no es por meter cizaña, pero en su tiempo comenzaba con "Per a ofrenar a la nostra senyera", sin ninguna referencia a las glorias españolas). Tonterías de un servidor, al igual que el arrejuntamiento de nacionalistas antimonárquicos en una copa futbolística monárquica en pleno siglo XXI. ¡¡Aúpa Athletic!!


PD: Editar el blog con Internet Explorer es patético. O, mejor dicho, patatético, porque da pena que salga como una patata. Menos mal que me lo arregla el Firefox.

domingo, 26 de abril de 2009

Al rico palabro


No resulta difícil encontrar palabros navegando por Internet, maremágnum de la palabrería. A ellos hemos de sumar las aportaciones del saber popular afianzadas a lo largo del siglo XX (como analís --un analís frente a unos análisis-- o diabetis --exceso azúcar en sangre de ciertos hinchas sevillanos--) o a finales de éste (como monosensuales y livianas --sic--), hecho verídico donde los haya.

Mas, si bien estos últimos son testimonio fehaciente de las conversaciones de pensionistas en consultorios de la Seguridad Social, los palabros interneteros suelen ser el resultado de la ociosidad del internauta. Toda una labor creativa fomentada a veces por el uso de sustancias de dudosa calidad. Ello no impide que nos fijemos en ciertos vocablos que merecen ser puestos en circulación por su viabilidad como palabra eficaz, tanto por sonoridad como por el significado que se puede deducir de su morfología. Toma ya. Véanse algunos ejemplos (tomados en parte de escolar.net):

-Alcoholega. m. Compañero de farra etílica.
-Friknorante. adj. Que carece de conocimientos sobre la literatura de ciencia-ficción, los juegos de rol, la música heavy metal, El Señor de los Anillos, Star Trek, el anime y el sistema operativo Linux.
-Glutemato. m. Aditivo alimenticio cuyo abuso puede provocar graves desórdenes intestinales.
-Hamburguesamiento. m. Proceso político, social y psicológico en virtud del cual ciertos filetes rusos con un pasado juvenil izquierdista y hasta contestatario comienzan a asumir doctrinas menos radicales y de mayor conformismo con las normas que rigen el sector cárnico y, en general, con las creencias más generalizadas de la sociedad.
-Inservívoro. adj. Dicho de quien se alimenta de productos desechables como, por ejemplo, "Aquí hay tomate".

Y asín sucedáneamente. No me digan que la RAE no debería aceptar alguno de estos palabros typical spanish, teniendo en cuenta la cantidad de palabras inglesas que nos ha colado en la última edición de su diccionario. Pero, para diccionario de palabros, el de José Luis Coll (que Dios acoja entre sus senos, ya que --según Kevin Smith-- Dios es Alanis Morissette). El señor de Cuenca que actuaba junto a Luis Sánchez Polack (Tip y Coll en español, mucho mejor que typical en inglés, dónde va a parar...) tuvo a bien legarnos una joya de la cual proponemos a los académicos varios términos que deberían entrar hoy mismo en cualquier diccionario de español:

-ACAGÓSE: Final violento o trágico, después de una abundante o desordenada comida.
-BIERDA: Excremento con catarro.
-DEMOGRACIA: Humor del pueblo. (En raras ocasiones el pueblo está en actitud de disfrutarla. Pero cuando, excepcionalmente, sucede se llama "demogracia a Dios").
-EUROPEDO: Ventosidad expelida en un determinado continente.
-GENOBEBO: Ge no quiero beber. Ge no me da la gana. Ge soy abstemio.
-PRESTIDIGESTADOR: El que embaraza a la hembra por arte de magia.

Y así acabamos hoy. Por cierto, no les quepa ninguna duda de que cuando llueve, alguien le está enseñando a San Pedro cómo llenar un vaso de agua en sistema dual (franco-español).



domingo, 19 de abril de 2009

Palabros vaticanos

¿Quién dijo que el latín era una lengua muerta? Bueno, si le oliéramos el aliento a algunos prelados que alardean de su uso probablemente podríamos certificar la defunción de la madre de las lenguas romances.

Sin en cambio, en el nada anacrónico estado enclavado en la ciudad eterna (no me refiero a Madrid por sus obras, sino a Roma), hay quien se dedica a poner al día el léxico de la curia con los neologismos de los nuevos tiempos. ¡Hombre, un poco de aire fresco! (¿Seguro?) Verbigracia:

  • Motocicleta: birota automataria
  • Spot o anuncio televisivo: intercalatum laudativum nuntium
  • Esnob: novissimorum morum affectatum
  • Mirón: obscena observandi cupido
  • Tenis: manubriati reticuli ludos
  • VIP: amplissimus vir
La lista es larga... pero para muestra basta un botón. Es increíble cómo el inglés y cualquier otra lengua occidental echan mano del latín para crear nuevas palabras y en el Vaticano se complacen en buscar redundancias petulantes en gran parte de los casos. O discriminatorias, en otros. Una mujer no puede ser muy importante para la curia, ya que la Very Important Person se transforma en un "varón destacado" (vir excluye al sexo femenino). Resulta paradójico que no se escogiera amplissima persona, que vale para todo el género humano. ¿Misoginia, tal vez? ¿Y qué me dicen del intercalatum laudativum nuntium, cuando la palabra "anuncio" viene del latín annuntius, que significa lo mismo? ¿O del esfuerzo vano del señor francés que bautizó como motocyclette a un vehículo con motor de ciclo parecido a una bicicleta (como si motus o cyclus no tuvieran nada que ver con el latín)? Vaya modernización léxica... ¡¡están locos estos "romanos"!!

¿Adaptación a los nuevos tiempos o purismo regresivo? Precisamente las palabras nacen cuando no hay ninguna útil para denominar una nueva realidad. No creo que sea muy útil denominar al tenis manubriati reticuli ludos. La lengua es práctica. Otros, sin embargo, prefieren columpiarse en los cielos de la teoría y la moral manipulando la lengua para decirnos al resto qué debemos hacer. Curioso, en estas cosas no son "creacionistas". Qué rara su evolución.




lunes, 13 de abril de 2009

Arrebú, arrebuscando

Continuando con la línea cuasi arqueológica de mis reminiscencias de creadores de palabros desempolvé una cinta del dúo Gomaespuma. De ésas que perdían su virginidad cuando, radio-cassette en mano, grabábamos muchos a base de pulsaciones sobre el botón de pausa. Verdaderas Frankenstein de la radiodifusión, hoy constituyen un testimonio de nuestros recuerdos y gustos. Ríanse del Ipod. ¡Anda que no era creativo eso de darle al pause para sortear publicidad o cortar cuando creíamos necesario! Ni Luis Cobos, oigan.

Pues resulta que en ella hallé, oye (vaya aliteración de Martes y 13 me salió), un poema de Rafael Alberti (genial inventor de palabros) dedicado a un gran pintor, recitado por Guillermo Fésser, de los Fésser de toda la vida. Decía así:

El diablo hocicudo,
ojipelambrudo,
cornicapricudo,
pernicolimbrudo
y rabudo,
zorrea,
pajarea,
mosquicojonea,
humea,
ventea,
peditrompetea
por un embudo.

Amar y danzar,
beber y saltar,
cantar y reír,
oler y tocar,
comer, fornicar,
dormir y dormir,
llorar y llorar.

Mandroque, mandroque,
diablo palitroque.

¡Pío, pío, pío!
Cabalgo y me río,
me monto en un gallo
y en un puercoespín,
un burro, en caballo,
en camello, en oso,
en rana, en raposo
y en un cornetín.

Verijo, verijo,
diablo garavijo.

¡Amor hortelano,
desnudo, oh verano!
Jardín del Amor.
En un pie el manzano
y en cuatro la flor.
(Y sus amadores,
céfiros y flores
y aves por el ano.)

Virojo, pirojo,
diablo trampantojo.

El diablo liebre,
tiebre,
sítiebre
notiebre,
sipilitiebre,
y su comitiva
chiva,
estiva,
sipilipitriva,
cala,
empala,
desala,
traspala,
apuñala
con su lavativa.

Barrigas, narices,
lagartos, lombrices,
delfines volantes,
orejas rodantes,
ojos boquiabiertos,
escobas perdidas,
barcas aturdidas,
vómitos, heridas,
muertos.

Predica, predica,
diablo pilindrica.

Saltan escaleras,
corren tapaderas,
revientan calderas.
En los orinales
letales, mortales,
los más infernales
pingajos, zancajos,
tristes espantajos
finales.

Guadaña, guadaña,
diablo telaraña.

El beleño,
el sueño,
el impuro,
oscuro,
seguro,
botín,
el llanto,
el espanto
y el diente
crujiente
sin
fin.

Pintor en desvelo:
tu paleta vuela al cielo,
y en un cuerno,
tu pincel baja al infierno.

¿Adivinan el nombre del pintor? Si se les resiste ofrezco al lado una pista resolutiva: eso sí, como en los pasatiempos de los piñódicos la pongo al revés.



miércoles, 8 de abril de 2009

Arre, arrebú...

Arrebuscando en el baúl de los recuerdos me he encontrado con un grupo digno de mención en este espacio. Se trata de un trío desaparecido, reconvertido actualmente en dúo, en el que se mantiene Miguel Vigil asociado a Mariano 1'85. Ambos son humoristas y hacen uso de la canción en sus actuaciones desde que empezaron su carrera en el espectáculo, hace ya un poquito. Pero miremos más atrás.

El trío desaparecido se llamaba como el dúo actual: Académica palanca. Los otros dos componentes abandonaron tan curioso grupo por causas diferentes. Javier Batanero, "el guapo", se decidió por el mundo del cine (Leo, Octavia, Te doy mis ojos). Es actor y guionista y lleva sus propios espectáculos teatrales. Antonio Sánchez, "el alto", falleció en contra de su voluntad en 2003, así que presentó sus disculpas por no poder continuar. Empezó su carrera acompañando a Joaquín Sabina y trabajó con Javier Krahe. Junto a Alberto Pérez estas tres perlas grabaron el famoso disco La mandrágora, donde Antonio ponía sus dedos vertiginosos sobre la guitarra a fin de presentarnos la música que compuso para "Pongamos que hablo de Madrid" (ahí le diste, Antonio).

Así se nos quedó solito Miguel Vigil, "el bajito", quien (según su biografía) se crece ante las adversidades y ha llegado hasta los 2'20, pero como padece de vértigo nunca sale a la calle con más de 1'65. Se encontró con un señor de 1'85 que solía actuar en solitario (de lo cual ya andaba uno poco hartito) y surgió el flechazo. Académica palanca sigue pues en pie grabando nuevos discos, pero la época de Miguel con Antonio y Javier marcó una ídem (valga la rebuznancia) con discos como El misterio de las voces vulgares, donde fueron capaces de retorcer la lengua castellana y mostrárnosla pulcramente con sus vicios y virtudes. He aquí un ejemplo del más puro folkore ejpañó con grasia y salero.



Todo este rollo no vendría a cuento si no tuviera la buena costumbre de leer a Toni Solano (repasodelengua.blogspot.com), quien, como buen blogfesor que es (me encanta ese palabro), comparte su experiencia con la comunidad educativa. Enamorado y convencido trabajador de las TIC --Tecnologías de la información y la comunicación--, pone en práctica todos sus conocimientos en sus clases (¡¡los que andamos buscando llaves, enchufando cables y rezando para que funcione el wifi te lo agradecemos, Toni!!). Gracias a él, un servidor descubrió el sitio goear.com, con el que se puede acceder a escuchar música de todo tipo, como demuestra la pista musical incrustada más arriba.

Para despedirnos, un videohomenaje a los académicos palanquenses de antaño: posiblemente, su canción más conocida, uséase, Me llaman mala persona. Que la rían bien.



jueves, 2 de abril de 2009

Ínfimas condiciones, superlativos conflictivos

Me sigue sorprendiendo que en los telediarios se oigan cosas como "ínfimas condiciones" o "los accidentes de tráfico es la causa de...". Hay que rebuscar mucho para que una condición esté en un lugar muy muy bajo (que es lo que indica ínfimo, superlativo de bajo). Yo creo que valoramos las condiciones por su calidad, o sea, si son buenas o malas. Entendería que se quisiera hablar de la más baja condición social (ahí sí que hay una escala jerárquica en altura), pero si en la noticia se referían a un centro de atención de menores, lo que daba pena era su estado. Las condiciones podían ser salubérrimas o, en el extremo opuesto, completamente insalubres, magníficas o pésimas (lo contrario de óptimas). De hecho, seguramente no reunía ni las mínimas condiciones, y por eso su mala reputación ha trascendido y se ha convertido en un centro celebérrimo, pero en sentido peyorativo, es decir, de lo peorcito que hay, y lo peor de lo peor es lo pésimo. Como aquellas pésimas condiciones.

El avispado lector curtido en gramática habrá detectado que todas las palabras puestas en cursiva (menos bajo) son superlativos, o lo que es lo mismo, la cualidad de un adjetivo en su mayor grado (de rápido, muy rápido o rapidísimo, de rojo, muy rojo o rojísimo, de claro, muy claro o clarísimo y asín sucedáneamente, que diría el genial dúo Gomaespuma). Siempre nos sale algún superlativo cabroncete acabado en -érrimo (los ya vistos, más acérrimo --de acre-- o paupérrimo --de pobre--). Su uso es restringido, puesto que prácticamente los usamos para chinchar al prójimo: "Ah, ¿que no sabías que no se dice pobrísimo, sino paupérrimo? Claro, como no fuiste a colegio de pago...". La culpa de este lío lingüístico es, como casi siempre, de Zapatero... digo de los romanos, por aportar al castellano estas palabrísimas o palabérrimas.

Y para el que ya no se acuerde de los libros de EGB, lo que está en lo más alto (lo altísimo) es lo supremo como lo más bajo (bajísimo) es lo ínfimo; lo más grande (sigan poniendo -ísimos) es lo máximo como lo más pequeño es lo mínimo; por último, lo más bueno es lo óptimo y lo más malo es lo pésimo. ¿A que les suena un poco mal eso de más bueno o más malo (pudiendo decir mejor o peor)? Por eso tampoco suelen decir que esta persona es más grande o más pequeña en edad, sino mayor o menor. Pues hay quien duplica ese más y dice que alguien es más mayor (o sea, más más grande). En correspondencia, también existen pisos más altos que otros o superiores y más bajos o inferiores. Estas últimas cursivas se corresponden con los adjetivos en su grado comparativo. El lío viene cuando decimos que esto o lo otro es de calidad inferior, que no es lo mismo que de peor calidad (como no es exactamente lo mismo bajo que malo). Y peor aún cuando pensamos que algo ínfimo es algo muy pequeño (mínimo), lo que ocurre muy a menudo en los medios de comunicación.

Vamos, que se trata de un problema de graduación, ya que de grados va el asunto. No está tan claro si óptica (al consultar el libro de estilo) o universitaria (de quien elabora el texto), pero los redactores de los telediarios deberían ser más precisos al escoger sus palabros. Respecto a lo de que "los accidentes de tráfico es la causa de..." la reportera no le hubiera metido una patada a la sintaxis si hubiera puesto en plural el verbo es. Que sepa yo, si en algo se puede distinguir a un sujeto es porque está sujetado al verbo por su concordancia, verbigracia (toma palabro que te cagas): "Los accidentes de tráfico son la causa..." de lo que quieras, MariPuri, y quedas como si no te hubiera quedado ninguna pendiente de primero de periodismo.

Todas estas y otras gorrinadas que causa la lengua a los periodistos nos las hubiéramos evitado si los antiguos iberos hubieran plantado cara al romano invasor y estos últimos no nos hubieran metido tanto superlativo, tanta vid y tantas cosas que al cabo de los siglos aparecen rotas impidiendo reurbanizar el centro de la ciudad.

¿Quién sabe? Si no hubieran sido tan listos nuestros antepasados, pues ganaron con la romanización, igual ahora los habitantes de la península hablaríamos euskera y querríamos independizarnos de nosotros mismos. O tempora, o mores!



miércoles, 25 de marzo de 2009

¡¡Trata de arrancarlo, por Dios!!

No, no me refiero al incidente de Carlos Sainz y Luis Moya ni a una expectoración fallida. Es que se me ha hecho larga la espera de cierta competición y ya me había entrado el mono. Volviendo la vista atrás me percato de que nunca he hablado aquí de una de mis aficiones, que parece no tener muchas conexiones con el área de la lingüística. Craso error. Ahora que arranca el mundial de Fórmula Uno me doy cuenta de que es un tema que da mucho que hablar. Y no porque Alonso haga esto o lo otro o lo deje de hacer (que es lo que más da que hablar, si hoy ha hecho duro y mañana blando). Precisamente porque es una fuente inagotable de palabros ingleses. Pero una fuente que da pena, porque da muestras de la poca capacidad traductora de nuestros comentaristas (lo del periodismo deportivo ya me empieza a sonar a inteligencia militar o a responsabilidad política, toda una contradicción).

Eso sí, como hablan palabros ingleses parece que saben mucho porque están a la última y "es que esas cosas se llaman así". Cierto es que que las lenguas reciben préstamos de otras (ya hablamos de esto con el tema del fútbol) pero ya nadie llama referee al árbitro o goalkeeper al portero in Spain. Nos hacen creer que están at the parrot (al loro) porque llaman mass dumper a un distribuidor de masa o grip a la adherencia; porque es más guay decir que un neumático tiene graining en lugar de granulado, o sea Mari, de pelotillas de goma pegadas; porque dónde va a parar decir pit stop, porfa Borja, en lugar de parada técnica (de repostaje, cambio de neumáticos u otros ajustes); y qué me dices, PepiJuli, del blistering o ampollas en los neumáticos o del safety-car, como si no se le pudiese llamar coche de seguridad.

Con todo, no se le puede negar a la lengua inglesa ciertas palabras cómodas dignas de herencia (láser --Light Amplification by Stimulated Emission of Radiation-- es mucho mejor que su equivalente castellano aleer --Amplificación de Luz por Emisión Estimulada de Radiación--, que a nadie se le ocurrió usar y que podría provocar alergia a mucho español poco dado a la lectura). Pero en el campo de la F1 no hay innovación que dure mucho tiempo porque queda obsoleta enseguida, así que las palabras se las lleva el viento. El nuevo sistema KERS para los motores (Kinetic Energy Recovery System), que yo llamaría REC (si ya decimos sistema, no hay porqué repetir la sigla S y tenemos Recuperación de Energía Cinética; ya ves qué difícil, Pocholo). Claro que todo puede ser para evitar confusiones con un ogro llamado Shreck que tiene taaaanto que ver con este deporte.

Al margen de estas fruslerías yo me dispongo a pegarme mis madrugones y asustar al vecindario cuando haya un adelantamiento meritorio, con la venia familiar. Donde otros ven una competición aburrida (y a veces lo es) yo disfruto o sufro cada segundo porque cada carrera da para mucho si uno se ha criado desde bien pequeñito viendo cada domingo a Nikki Lauda, Keke Rosberg, Ricardo Patrese, Nelson Piquet, Ayrton Senna o Alain Prost jugarse el pellejo en el asfalto. Y que es un deporte muy completo, leñe, y si no fíjense en la variante de lucha que se puede disputar una vez el piloto se apea del coche. (Batalla del abuelito: de esto me acuerdo yo y eso que la carrera fue en el 82). No me digan que no es televisivo.



Además, el buen aficionado a la Fórmula Uno (así, en mayúsculas, porque es marca registrada y sus magnates exprimen hasta el último céntimo --¿e o no e, yerníssimo Agag?--) tiene sentido del humor y mucha gente invierte su tiempo en elaborar chorradas como el cartel de abajo, que a mí me hizo gracia en su momento, cuando McLaren no tiraba ni para atrás por sus roturas de motor Mercedes (Merche, para los amigos). Les dejo, que tengo una cita con el Gran Premio de Australia. Que ustedes lo arranquen bien.




viernes, 20 de marzo de 2009

Retazos postapocalípticos

Acabo de hacer mutis por el foro, pero no por el teatral, sino por el foro madrileño. Regreso de un exilio forzoso provocado por el apocalipsis fallero, en el cual bestias de diez cuernos y siete cabezas surgen de las carpas que colapsan las calles arrojando masclets por sus bocas. Bueno, tal vez exagere un poco, pero cualquiera que viva en Ruzafa y no sea fallero puede ver las cosas de forma no muy distinta.

Tuve oportunidad en los madriles de practicar inglés con algún turista ante su ofrecimiento para ayudarme con el carrito de mi hija (con ella a bordo) y arrejunté unos vocablos tal que "It's more difficult for me to up que downstairs", pretendiendo decirle que ya me apañaba bajando el carrito por las escaleras del metro, que lo chungo era subir por ellas, y que cenquiuberimach por su colaboración pero ya podía yo solito, machote, escaleras abajo. Quede dicho que los minusválidos madrileños deben desconocer el transporte suburbano dada su nula accesibilidad. Piénsenselo si van a los madriles con niños y carritos anejos.

Por lo demás, fui un turista más (exiliado, eso sí, insisto) recorriendo en familia las calles de la urbe capitalina. No pude evitar echarle el ojo a algunos cartelitos, no ya con la visión pejiguera y correctora ortográfica de anteriores entradas, sino con más amplitud de miras, la del mirón curioso. Por ejemplo:

Cualquiera preguntaría si se puede tomar un Frenadol con Bacardí en este establecimiento. Tranquilos, no es una apoteca (o botica), sino más bien una bodega (tres palabras que provienen del griego romanizado apotheca, que vale para cualquier sitio donde te venden cosas para el dolor de cabeza, sólo que en uno te lo arreglan y en otro te lo provocan). Prosigamos con el paseo.

Alguna vez hablamos de que la gente se excusa en las mayúsculas para no poner tildes. Sin embargo, la ausencia de éstas en el cartel nos da a entender que la tienda musical no cesa su venta (continua la venta no es lo mismo que continúa la venta: debe estar también de guardia las veinticuatro horas del día) en la calle del Espejo. Vamos, que no paran de vender instrumentos a troche y moche: un sinvivir para los pobres dependientes. Aunque nada más desconcertante como el siguiente cartel:

A mí me enseñaron a leer de izquierda a derecha y de arriba a abajo. Aún me estaría preguntando qué venden en el Tadel Bermedio Nadia si no fuera porque me acordé de que los chinos y los árabes utilizan otro sistema. Cambié el orden normal de lectura y me di cuenta de que el Delta Mediober Diana tampoco tenía mucho sentido. Debe ser que visitar una taberna al mediodía hace estragos en la lectura (y en la escritura).

A veces me quejo por puro vicio. Tanto criticar a la gente que no pone tildes y ahora tengo que criticar lo contrario. Bien mirado debe ser un desplazamiento de la tilde del pronombre sujeto Él al pronombre tónico de complemento preposicional ti, que no la necesita. Es que estas tildes son un poco díscolas y no se dejan llevar por el buen camino. Son unas tildes descarriadas. Tal vez en la iglesia encuentren el camino recto.

Y para acabar este recorrido cartelístico por Madrid nada mejor que constatar que la señorita Bernarda ha mejorado en el escalafón social. Sin duda que de tanto ahorrar con su antigua profesión ha podido agenciarse un local donde servir copas, así ya no tendrán que hablar de sus partes nobles. En fin, que me han entrado ganas de tomarme una cervecita, no sé por qué será, y les voy a tener que ir dejando. Que ustedes lo pasen bien.

jueves, 12 de marzo de 2009

Retazos preapocalípticos (antes de fallas)

Con cierto retraso acudo a mi cita cuasisemanal, en parte porque no tenía muy claro qué contar, en parte porque tenía otras cosas en las que pensar o que hacer. Pero lo que es estar, estoy en las mismas. Pensé en recordar a Pepe Rubianes, prestidigitador de las palabras, que nos dejó huérfanos de la coña marinera el uno de marzo. Sin embargo ya estaba todo dicho en múltiples dedicatorias de muchos artistas, periodistas y gentes de mal vivir, como la de Javier Pérez de Albéniz (ex de El Mundo y colaborador de Soitu.es). Y como es mejor tener la boca cerrada si no se tiene nada mejor que añadir, servidor se queda a boca chiusa como en el coro de Madame Butterfly.

Por otra parte, me parecía excesivamente escabroso dedicar una entrada a la absolución de un asesino por parte de un jurado popular en Vigo. ¿Dije asesino? Perdón, alguien que mata de 57 puñaladas a dos personas y luego prende fuego al lugar de los hechos debe ser sólo un pobre homicida que actúa en defensa propia, no un asesino. Por lo visto, ante la posible amenaza de que le dejaran el pompis como para que se le cayesen los supositorios prefirió optar por una medida drástica, en lugar de darse el piro del pisito al que acudió para seguir una noche desenfrenada de drogas y alcohol. Pero claro, en este país cargarse a un monosensual es diferente. La integridad del fistro duodenal del macho ibérico no puede ser cuestionada. ¿Hubiera reaccionado igual el jurado si las víctimas hubieran sido mujeres? Afortunadamente, a este ser con los cables cruzados, (qué buen papá va a ser) aún le pueden meter en el trullo... ¡por el incendio! Habrá que reformar las acepciones de ensañamiento.

Al final he optado por subir el volumen a las palabras que no se oyen. No porque se digan bajitas. Sino porque no ocupan espacios en los telediarios o se publican en rincones apartados de algún periódico. Como, por ejemplo, la dimisión del director general de Terra Mítica ante la pretensión de vigilar su contabilidad. Ese parque sí que es un verdadero agujero negro de las cuentas públicas valencianas y no lo que buscan los astrofísicos. Más indignante es saber que un abogado ha sido condenado a la cárcel por aceptar sobornos de... ¿se lo imaginan? Berlusconi (¡¡tacháaaaaaaan!!). Pueden poner la mano en el fuego por quien no va a ir a la cárcel habiéndole pagado el módico precio de 600.000 € por los servicios prestados. ¡Qué cosas tiene la vida! Si te untan vas a la trena, pero el untador puede ejercer de primer ministro de Italia sin problema.

En fin, naderías que no van a ningún sitio porque carecen de interés. Da la impresión de que a los medios informativos no les preocupa qué pensemos, ya que por lo visto el público debe haber perdido tal capacidad. Afortunadamente hay compañías aéreas que, por lo menos, se interesan en saber que sus clientes piensan y utilizan la cabeza. Vamos, que no son unos descerebrados (gracias, Peter Parker, por acercarnos el blog de José María Romera : http://romera.blogspot.com).

Claro, que ahora que lo pienso, tal vez a la compañía le gustaría saber qué piensan sus clientes, no que piensen (hete aquí la importancia de saber inglés: poder entender lo que se escribe mal en español). Pensándolo bien, alguien se dejó la tilde, esa gran desconocida.