martes, 30 de diciembre de 2008

Venga, que me se acaba, nenas

Se nos va el 2008 como el presupuesto a fin de mes. Es decir, que la próxima entrada de esta ensalada será en 2009. Vamos, pues, a hacer el enésimo resumen del año (¡¡no, no se vayan todavía!!) sin propósitos para el que viene, que bastantes despropósitos nos ha dejado el que se marcha. En este año hemos visto de to, de to:
-en enero se seleccionó el himno de un parado per a ofrenar noves glòries a Espanya pero, ¡oh milagro!, se impuso el menos común de los sentidos (el sentido común) y se renunció a hablar del tema de poner letra a la marcha de granaderos, que es el soniquete al que más de una generación puso la letra "Franco, Franco, que tiene el culo blanco porque su mujer lo lava con Ariel";
-en febrero Fidel dejaba el poder a su hermano Raúl en Cuba (más de uno se frotaba las manos por si la espichaba pero el tío sigue ahí con el mismo chandal del 2007 y soltando el rollo en Granma que da gusto);
-en marzo vivimos unas elecciones generales que dejaron todo más o menos como estaba antes, pero mucho peor para Llamazares, Acebes y Zaplana (¿o no?);
-en abril y en Italia, para llevarnos la contraria como siempre, salió recontraelegido Berlusconi (¡¡una vez más, qué mal que tienen que estar los italianos para llegar a estos derroteros!!);
-en mayo Rodolfo Chikilicuatre consiguió sin más ni menos el decimosexto puesto en Eurovisión, que dado el nivel del festival es casi como si lo hubiera ganado;
-en junio el maleficio deportivo que persigue a España desde que el fúmbol es fúmbol se rompía después de que Contador y Nadal les sacaran los calzoncillos a sus rivales y mientras el amigo de Bush Ánsar le daba la mano a Rajoy con una cara da asco que daba gusto (toma oxímoron);
-en julio Sastre ganó el Tour, pillaron a Radovan Karadzic disfrazado de papá Noel aunque sin el traje, liberaron a la Betancourt (¡¡joer con el marido de la Bruni!!) y Chávez y papá Borbón (de los Borbón y Borbón de toda la vida) parecían amiguitos de toda la idem después del sobreexplotado "¿por qué no te callas?";
-en agosto los chinos demostraron en unas olimpiadas bastante controvertidas que, cuando se lo propongan, su gobierno puede poner los pies en polvorosa en el momento en que digan ¡¡a la mielda!!;
-en septiembre, cuando parecía que los españoles tenían esperanza de comprar piso debido al estallido de la burbuja "que nunca existió", los EEUU van y nos pringan a todos con la mayor estafa de la historia (que es lo que todos nos imaginamos: cuando va bien ganan los de siempre, y cuando va mal perdemos todos menos ellos) y claro, vaya usté a pedirle un préstamo al banco y verá la risa que le da;
-en octubre el día de las Fuerzas Armadas seguía siendo un coñazo para todos, pero queda de lo más campechano que lo diga el líder de la oposición que tanto ama a su ejército y a su banderita de la Plaza de Colón;
-en noviembre los estadounidenses confirmaron que cualquier persona puede llegar a la Casa Blanca (mientras tenga mucho muuuuuuucho apoyo pecuniario). Si alguien como George W. Bush pudo llegar ¿por qué no un negro?;
-en diciembre ya no se le podía decir más claro a Bush (hay que ver el amor que le tengo con tanta dedicatoria). Se lo dijeron con unos zapatos turcos de lo más monos que están vendiéndose como rosquillas. No le dieron y, sin embargo, a muchos nos duele Gaza como si le hubiesen dado.

Hale, ya solté el rollo. Espero que haya sido menos indigesto que otras noticias del año o que la cena que mañana se van a meter entre pecho y espalda. Ah, se me olvidaba algo importante: en este año ustedes dedicaron parte de su tiempo a pasearse por este blog en pañales. Muchas gracias por ello y no se atraganten con las uvas, que el año que viene habrá más que leer.

domingo, 21 de diciembre de 2008

Advierto de que no conoces de lo que hablas

Así me he desayunado, con un titular de Elpais.com en el que el nuevo secretario de ceceoo (para Urdaci, Comisiones Obreras) manifiesta que "Aquí hay mucho opinador que no conoce de lo que habla". Supongo que quería decir que tal opinador no sabía de lo que hablaba, ya que uno no conoce nada o bien conoce algo, poco o mucho de lo que habla. Lucidos estamos si a las primeras de cambio al estrenar cargo los que nos representan hablan así de mal y nos cambian el comportamiento de los verbos o sus complementos. Por cierto, ¿conocen de Ignacio Fernández Toxo, el ínclito secretario?

Por otro lado, completando el titular, proseguimos con el verbo advertir. Resulta sorprendente que durante muchos años las cajetillas de tabaco españolas llevaran una advertencia con más fallos que palabras. Así lo advirtió (se dio cuenta) hace mucho tiempo el filólogo de la Agencia Efe Alberto Gómez Font y lo publicó su actual presidente, Álex Grijelmo, de quien ya hemos hablado alguna vez. Y los dos nos han advertido de (puesto en conocimiento de) los errores de la famosa frase "Las Autoridades Sanitarias advierten que el tabaco perjudica seriamente la salud". ¿Los han advertido? La primera vez que busqué los errores no daba pie con bola, pero ahí va la explicación:
-autoridades sanitarias van en minúscula, por no ser ninguna entidad con nombre propio;
-ya hemos visto la diferencia entre advertir algo y advertir de algo, aunque el uso de este verbo a veces es un poco lioso;
-lo que perjudica no es el tabaco, sino sus miles de aditivos, y más concretamente, fumárselo;
-se perjudica a alguien o a algo, con preposición, aunque en este último caso la preposición a es opcional; Gómez y Grijelmo hilaron muy fino, pero la verdad es que el uso mayoritario es perjudicar a;
-la salud no puede ser perjudicada seriamente (calco del inglés serious) ni alegremente, porque no hay enfermedades serias o alegres; en todo caso son graves, así que se debería decir gravemente.

O sea, que el cartelito de marras debería ser: Las autoridades sanitarias advierten (al público) de que fumar tabaco perjudica gravemente (a) la salud. Tal vez ese de que suene mal si nos dejamos el complemento directo que he añadido entre paréntesis, lo que pasa es que el verbo advertir se usa en otras construcciones como Le advirtió que no invirtiera en Madoff, sin la preposición de y correctísimamente. Pero aquí significa "aconsejar". Y las autoridades sanitarias no pueden aconsejar que fumar tabaco perjudique a la salud. Nos ponen en conocimiento de que es perjudicial.

Vaya lío. Creo que esta vez m'he pasao. Como Madoff.

Viñeta de Peridis en El País.


domingo, 14 de diciembre de 2008

Natividades por solsticios


¿Ya han recibido algún christma, amigos lectores? O lo que es lo mismo, felicitación de Navidad, o postal navideña. Queda más guay decirlo en inglés, aunque en realidad en inglés digan christmas card (postal de la misa de Cristo=Christ mass>Christmas). Los hijos de la pérfida Albión quieren confundirnos, ¡voto a Bríos! hasta en nuestras más remotas tradiciones. Mira que llamarle misa de Cristo a la Natividad (Navidad en el Corte Inglés, desde noviembre).

Y la confusión va más alla de usar un falso amigo (pues la mente maliciosa de los hijos de la Gran Bretaña nos hace liarnos con la española "crisma" --aceite para ungir o cabeza--) para contar chistes malos. Ese señor gordo vestido de rojo que hemos o nos han importado es un impostor. Nos han vendido que tiene su origen en un obispo canonizado llamado Nicolás (Claus) de Bari, que no era italiano, sino turco, por cierto. Y con él pretenden suplantar a nuestros míticos Reyes Magos (que ni eran tres, ni eran reyes, ni eran magos --para inventarse tradiciones, cuanto más gordo sea el bulo, más mejó--). En realidad ese gordo de pasado oscuro tiene más curriculum que Leonardo da Vinci. Los estadounidenses lo fusionaron con el Joulupukki finés y le otorgaron sus renos voladores y un contrato indefinido con Coca-Cola.

Ahora bien, ¿sabían que en origen ese Joulupukki (=cabra de Yule) era un espíritu maligno vestido con pieles de cabra que exigía regalos en la celebración del solsticio de invierno (fiestas de Yule, en Finlandia)? Eso sí que es reintegrarse en la sociedad. ¿Y que vestía de rojo porque los chamanes nórdicos se ponían hasta las cejas de orina de reno, animal que abusaba de las setas alucinógenas y lo veían todo de ese color, además de ver volar a "Rudolf" o a cualquier bicho viviente que pasara por allí?

Otro gallo nos cantaría (no el de la misa) si nos diéramos cuenta de que muchísimo antes de la Navidad ya se celebraba que por fin los días volvían a crecer, en vez de menguar. Que nacía un nuevo año solar. Que había que despendolarse durante una semanita. Que las fiestas finesas de Yule tienen su equivalente en Irán (fiestas de Yulda). Y que yule y yulda se parecen porque provienen del indoeuropeo, que era lo que se farfullaba antes de que los romanos rindieran honores a Saturno y a Apolo (este último dios del Sol) allá por el 25 de diciembre, momento que aprovechaban para hacerse regalitos, liberar esclavos o relajar la presión militar. Y que un día unos señores decidieron ponerle fecha al nacimiento de Cristo casualmente el 25 de diciembre, cuando seguramente fuera por marzo (había que sustituir las fiestas paganas). Hasta tal punto era de fiar el señor que calculó la fecha del nacimiento de Jesús que se equivocó ¡¡en más de cinco años!!, según sabemos hoy. O sea, que en realidad deberíamos ir por el 2013, como poco.

Como diría cierto galo irreductible, respecto a ciertas celebraciones religiosas... ¡¡están locos estos paganos!!



domingo, 7 de diciembre de 2008

Puente de la Inmaculada Constitución

¿Qué celebramos este puente? ¿El día de la Constitución? ¿El de la Inmaculada Concepción (ya, ya, inmaculada: que se lo digan a San José)? ¿Que ya es Navidad en el Corte Inglés?

La respuesta es muy sencilla: de puente, nada. Esta vez no pueden echarnos en cara a los profesores que vaya puentes nos cogemos, porque los días 5 y 9 son laborables y el 7 cae en domingo. Más difícil es el asunto de la celebración. La Consti la celebran unos pocos con jornadas de puertas abiertas de Cortes varias que, en la mayor parte de los casos, sirven para alabar al presidente de comunidad autónoma de turno (léanse algún periódico valenciano, si no). El día de las Conchis es celebrado por las homónimas y aproximadamente el 1'5% de los creyentes católicos (del 90% que dicen que hay en este país respecto a la población atea, musulmana o judeomasónica, o sea, el otro 10% de los españoles --cifras poco fidedignas, por cierto, porque me las he inventado yo, pero siempre nos recuerdan que es más o menos asín; otra cosa es que nos lo creamos--).
Pero ante nombres tan rimbombantes como el de la Carta Magna o el verdadero que hay detrás de las Conchitas españolas (si hay alguna en países americanos debe haberse exiliado ya, conshatumadre, porque allí la concha es directamente proporcional a la figa valenciana), yo prefiero llamar a estos días los de la Inmaculada Constitución. Suena más rimbombante aún. Pero no lo es para menos teniendo en cuenta que no se le ha metido mano para adaptarla a los cambios sociales en 30 años, tal y como observan en El Jueves. Como mucho, la puntita en algún artículo. Pero sigue con su himen impoluto como una tal Maruja de hace más de 2000 tacos. ¿No va siendo hora de darle una alegría a la moza?